viernes, 30 de agosto de 2013

Vientos nuevos en la Universidad Veracruzana
Manuel Martínez Morales

La designación de la doctora Sara Ladrón de Guevara como rectora de la Universidad Veracruzana abre la posibilidad de iniciar un proceso de renovación –basado desde luego en un diagnóstico puntual sobre las fortalezas y debilidades de la UV– que permitirá la consolidación y avance de las funciones sustantivas de la Universidad: docencia, investigación y difusión de la cultura.

A pesar de las suspicacias que rodearon al proceso, la Junta de Gobierno se las arregló para estar a la altura de las circunstancias y, apegándose estrictamente a lo marcado en la legislación universitaria, eligió al mejor candidato para ocupar la rectoría, esto es a la doctora Sara Ladrón de Guevara.

Dado el amplio y sólido curriculum de la doctora, al reconocimiento nacional e internacional que por su trabajo ha alcanzado y a su experiencia en cargos de dirección académica, seguro estoy que el género no fue un factor decisivo, aunque creo que es motivo de beneplácito el que, por primera vez en la historia de la UV, sea una mujer quien ocupe la Rectoría.

La esperanza de un cambio renovador en la UV se deriva principalmente de la propuesta de la académica quien intenta combinar tradición con innovación; esto es, tomando como punto de partida lo mejor de la tradición universitaria, pretende ahora enlazar estos elementos con propuestas innovadoras que permitan dar un paso hacia adelante en lo referente a las funciones universitarias sustantivas. Sin dejar de lado, por supuesto, la atención a otros problemas ingentes que la Universidad enfrenta desde hace tiempo, como son la ampliación de la matrícula y el fortalecimiento del financiamiento que recibe la UV.

Conociéndola, creo que también atenderá demandas reiteradas en los últimos años como son: una reforma bien sustentada de la Ley Orgánica; la urgente revisión y evaluación a fondo del Modelo Educativo Integral y Flexible, cuyas limitantes y signos de agotamiento se han señalado repetidas veces; así como una profunda revisión de la forma en que se decide, asigna y distribuye el presupuesto universitario.

Es de reconocerse el apego –en la letra y el espíritu– de los integrantes de la Junta de Gobierno al Reglamento Interno de la propia Junta, que establece en su Artículo 28 que en la elección de Rector se tratará fundalmente de establecer un juicio de idoneidad académica entre: a) El bien de la Universidad y b) Las características de cada candidato.

En particular, se toman en cuenta las características de los candidatos con relación a tres aspectos: I. La Institución: a) Comprensión de la situación académica-administrativa de la Universidad; b) Comprensión de la situación política interna de la Institución; y c) Concepción del futuro de la Universidad; II. El medio externo: a) Independencia, real y manifiesta, ante los intereses económicos y políticos, de modo que pueda representar efectivamente la autonomía de la Institución; y b) Reconocimiento en el medio de la educación superior estatal y nacional; III. Su capacidad para ejercer el puesto de Rector: a) Capacidad académica: sólida formación científica y/o humanística, amplios logros académicos y profesionales reconocidos y capacidad de crítica; b) Capacidad administrativa: liderazgo; creatividad e iniciativa; experiencia en responsabilidades de administración universitaria, en su caso; y c) Capacidad humana: honestidad; respeto a las personas y buenas relaciones humanas; prudencia y personalidad adecuada para representar a la Universidad.

Para quienes conocemos a la doctora Sara Ladrón de Guevara no hay duda que cumple cabalmente con las características señaladas y quienes no la conocen podrán apreciar estas características si revisan su curriculum y buscan referencias personales entre quienes han tratado con ella.


Todos los universitarios debemos felicitarnos por la designación de la doctora Sara Ladrón de Guevara como Rectora de nuestra Universidad, pues estamos seguros que no solamente cumplirá con los compromisos asumidos en su propuesta, sino que será receptiva a las propuestas emanadas de la propia comunidad universitaria.

miércoles, 28 de agosto de 2013

La bestia
Luis Gerardo Martínez García


Viaja sobre rieles que la historia le dejó para llevar el cargamento especial de sur a norte. Sus fuertes hierros le permiten transportar en su lomo al centroamericano que sueña en vivir mejor, huyendo de la desesperanza de su tiempo y de su espacio. La bestia, ferrocarril de águila y serpiente a paso lento ayuda a avanzar por esos días de hambre, frío y maltrato; promete al extraño llegar a sitios desconocidos donde se habla otro idioma,  se promulga otra religión y se cantan rituales extraños, con la certeza de casi todo y casi nada.

La bestia entraña la maldad que le imprimen sus malvados; resguarda la posibilidad del camino incierto que andan sus huéspedes; viaja la noche acompañada de la oscuridad que oculta la perversidad y a su vez la nobleza; cultiva la ilusión de querer ser mejor y crecer entre lo desconocido. A la velocidad del día juega con el peligro, vendiendo la idea de que es la solución a todos los problemas. Si, es la solución a las ausencias de aquellos que gobernantes se creen, y que no saben ni voluntad tienen de la indocumentabilidad-ilegalidad del migrante [ni de sus expectativas se interesan].

En ese viajar constante, la bestia acompaña a la pobreza y le hace creer que mañana el amanecer será distinto, que el sol será otro, que el dólar está en espera, que la historia nadie la conocerá. En tanto los migrantes corren, huyen, se alejan sin saber el rumbo del escondite y si éste les aguardará la golpiza o la muerte.

La bestia es ese monstruo en el que se peligra, en el que la vida no vale nada, en el que se pierde todo, en el que no existe el tiempo, en el que se va en compañía de la soledad, en el que comer puede esperar, en el que se pierde al amigo, en el se proteje a la esposa y se arrulla al hijo. Es el enigma en el que se está seguro que no se sabe nada del mañana; es la salida fácil de aquel vivir sin agua, sin zapato, sin escuela; es la entrada a la bestia que aplasta con su potente armamento y su embrutecido pensamiento.

De carga o de pasaje pasa sin ser visto con miles de ilusiones sin permiso para soñar. Sin carga y sin pasajeros se esconde entre la montaña, el bosque, el puente o la estación a la vista de aquellos que vigilan los derechos... Querida y odiada, la bestia anuncia el paso de la piel morena que no sabe de fronteras ni murallas, renuncia a seguir ocultando la realidad de la desgracia llevándose sin querer entre sus rieles piernas o brazos, mutilando la extremidad, no así la posibilidad.

Las patronas y la bestia se unen en complicidad ayudando en lo efímero de ese trans-curso que mitiga el hambre y fulmina el olvido. El errante se confunde con el casero, se hacen uno al andar porque buscan casi lo mismo, casi con lo mismo, y aunque sigan en lo mismo. El viajero se cubre con ese cobijo divino que le envuelve el alma, bajo el intemperie; se alimenta del arroz y la tortilla de las patronas, y se aloja entre vagones, ruidos y silencios de la bestia. Las patronas, el tren y los indocumentados se necesitan, sin ellos mismos no existirían, dejarían su razón de ser, para hacer lo que no han hecho; los tres huyen del pasado creyendo en el futuro sin detenerse en el presente porque lo rápido del viaje no se los permite.

Ese ferrocarril en su diversidad amorfa simboliza la creciente desigualdad entre los propios, la ausencia de iniciativas del gobernante, la fragilidad de la justicia, lo portentoso del que delinque, la nobleza del ciudadano, la ignorancia del iletrado, la fortuna del que comanda. La bestia significa el transcurso, en lo inhóspito, de una desesperanza a una ilusión entre realidades que llevan con relativa seguridad a lo incierto, a la vida o a la muerte. Entre la bestia y lo apocalíptico hay esa enorme distancia pasajera que lo es nada.

--—------------------
http://luisgerardomartinezgarcia.blogspot.mx/

Los maestros democráticos, bajo sitio
Tatiana Coll

Ciro Gómez Leyva apareció en la pantalla con el rostro desencajado, visiblemente resentido y contrariado por la decisión de retirar, aunque fuese momentáneamente, la Ley sobre el Servicio Profesional Docente que debía de ser votada sin excusa ese mismo día. Su mirada y su voz trasminaban mucho más que una simple molestia; en realidad se percibió una ira escasamente controlada, una ira que sólo puede ser provocada por un enraizado odio de clase: ¡no era posible que un tumulto popular haya doblegado al Congreso! Después lo dijo claramente: han aceptado sacar la ley que representa el corazón mismo de la reforma, y eso no se puede permitir. Una ira que se percibe igualmente en las cúpulas mediáticas del continente cuando hablan de los diversos gobiernos democráticos, una ira muy parecida a la de los medios chilenos, encabezados por los momios pinochetistas, cuando se refieren a los estudiantes que luchan por una educación pública.

Siguiendo puntualmente esta pauta, las televisoras y radios han establecido un duro estado de sitio sobre el magisterio democrático. Los empresarios, los medios y el Pacto por Peña Nieto están concentrados en construir un cerco que les permita avanzar impunemente hacia la represión, ya lo dice abiertamente el señor Camacho Quiroz. Sus comentaristas repiten sistemáticamente la misma cantaleta: vandalismo, irracionalidad, oscuros intereses personales, por lo cual concluyen: los maestros no quieren ser evaluados. Mentiras bien calculadas, pues no ha habido actos de vandalismo en las marchas y plantones de miles de maestros; no hay irracionalidad en acudir a la manifestación pública cuando después de meses en que han presentado sólidos argumentos en cientos de documentos nadie los toma en cuenta; no hay oscuros intereses cuando se está defendiendo el derecho al trabajo y, sobre todo, no hay rechazo a ser evaluados, sino a cómo y para qué se les quiere evaluar. No son los maestros los que tienen sitiado el Congreso y a los ciudadanos, como despotrican los medios: es la cerrazón total, el desprecio y la displicencia de todos los que deciden en torno a estas modificaciones lo que ha sitiado a los maestros democráticos y los obliga a romper el cerco con sus únicas posibilidades: la movilización masiva.

Podría asegurar que 90 por ciento de los congresistas ni siquiera han leído con un mínimo de detenimiento las leyes que votan tumultuariamente, irracionalmente, a gritos y sin presentar ningún argumento válido para arrancar a los maestros la estabilidad laboral. Si se aplicara una evaluación, incluso estandarizada, a los diputados sobre el contenido de las leyes que votan, los resultados serían patéticos; están acostumbrados a actuar bajo consigna y en la impunidad.

El corazón de la reforma es efectivamente la Ley del Servicio Profesional Docente, que asienta textualmente que en los casos de quien no se incorpore a los programas de regularización o no alcance un resultado suficiente en la tercera evaluación, se darán por terminados los efectos del nombramiento correspondiente sin responsabilidad para la autoridad educativa. Esto determina prácticamente un estado de excepción sobre las condiciones generales de trabajo de uno de los profesionales que históricamente han aportado más a la fundación de un país justo y digno. No hay para ningún otro profesionista una ley específica que reglamente de manera excluyente y excepcional sobre los derechos laborales. Ni a los médicos, ni a los ingenieros, ni a ningún especialista contratado con una plaza de base se les somete a esta nueva reglamentación. No se concibe nada semejante para esa enorme cauda de funcionarios que andan brincando de puesto en puesto sin siquiera tener el perfil adecuado; tampoco a los representantes de la nación que nunca, ni siquiera, rinden cuentas a sus electores. No se han realizado evaluaciones a los expertos que construyen esa cantidad de exámenes estandarizados, plagados de errores reiteradamente señalados, igual que los libros de texto, que pululan por el Conacyt, Ceneval, Comipens, INEE y otros organismos autónomos.

La mentira más grave y cínica de todas las que a diario nos remachacan en los medios, la que el propio presidente Peña Nieto ha dicho, y que repiten todos, es la de que no serán afectados los derechos laborales del magisterio. Demagogia y cinismo han caracterizado siempre al discurso priísta, en el cual es todo un experto el señor de los chinchones, actual secretario de Educación; sin embargo, la ira que traspasó la mirada y palabras de Ciro Gómez Leyva y otros, como el diputado Alberto Villarreal, del PAN, demuestra que el objetivo real es deshacerse ya de ese magisterio democrático molesto. Es el mismo odio de clase que llevó al obispo de Ecatepec a decir a Fox que no importaba si tenía que acabar con unos 300 atenquenses, pero que no reculara en la decisión

martes, 27 de agosto de 2013




Poligrafías
Por Luis Gerardo Martínez García

***
MÁS ESCUELAS PARTICULARES EN VERACRUZ. Es secreto a voces que se crean más escuelas particulares que públicas hoy en día. Aún así se sigue negando la tendencia privatizadora de la educación. Ya no es extraño encontramos con frecuencia escuelas nuevas de todos los niveles y modalidades pertenecientes a la iniciativa privada. Y las escuelas públicas siguen siendo las mismas. Al inicio del presente ciclo escolar la titular de la Dirección para la Incorporación de Escuelas Particulares de la SEV, Ruth Callejas Roldán (hermana del Secretario General de la Sección 32 del SNTE, Juan Nicolás Callejas Roldán e hija de Juan Nicolás Callejas Arroyo, diputado plurinominal de la próxima legislatura local) declaró que aumentaron las escuelas privadas, principalmente en el sur de la entidad: "Iniciamos muy bien, tuvimos muchas escuelas en Educación Básica, más en la zona sur del estado, donde se registraron más incorporaciones, lo cual significa mucha competencia, mucha calidad y muy buena (sic)." Me parece que es buen momento para hacer una evaluación rigurosa de las escuelas privadas y de las políticas que están permitiendo la incorporación masiva de ellas.

***
LOS MAESTROS INDIGNADOS AUMENTAN. Pablo González Casanova trabaja el concepto Indignados desde una perspectiva social, aludiendo a los movimientos de universitarios, de indígenas, de maestros y demás grupos organizados que denuncian (molestos) los malos manejos y atropellos a los que incurre constantemente el Estado en diferentes partes del mundo, especialmente de América Latina. De ahí es que ahora se hable de Maestros Indignados, en tanto manifiestan su inconformidad por el actuar del Estado en su contra y de la educación pública. Y es que desde donde se le quiera ver, los grupos en el poder están privilegiando la privatización de la educación. La CNTE es un ejemplo de estos movimientos sociales en contra del neoliberalismo y de las políticas de Estado que atropellan no sólo las condiciones laborales, sino el propio proceso educativo, que es peor. Los Maestros Indignados cada vez son más. Cerca de 180 sindicatos magisteriales a nivel nacional se están sumando al rechazo de la reforma educativa. Quienes sí aceptan los postulados de la RE son los dirigentes del SNTE, aunque sus agremiados también estén indignados por su postura, su silencio y su abnegación; los Maestros también están Indignados con sus dirigentes. Entiéndase entonces que los maestros no rechazan una reforma educativa, pero sí protestan porque se violenten sus derechos laborales y se denigre la educación pública del país.

***
LA UNIVERSIDAD VERACRUZANA, CUANDO EL PROCESO SE VOLVIÓ ANÉCDOTA . Todo parecía que iba bien en la Universidad Veracruzana en el último tramo de la administración del rector Raúl Arias Lovillo, incluido el periodo de elección del nuevo rector (a). Todo empezó a tomar un rumbo torcido desde el momento en que renunció una integrante de la Junta de Gobierno (sin mayor explicación); desde que apareció en escena un ex rector pretendiendo regresar; desde que se empezó a mencionar que el rector apoyaba a su secretario académico; desde que se cuestionó la legalidad de otro miembro de la Junta de Gobierno; desde que se tomaron las instalaciones de la USBI antes del último informe del rector. Desde ese momento casi todo se volvió anecdótico, pues los proyectos universitarios y académicos de los aspirantes a la rectoría de la Universidad Veracruzana pasaron a segundo término. Lo esencial se perdió de vista en nuestra máxima casa de estudios. Las propuestas de los aspirantes finalistas se difuminaron entre el rumor y la acusación. De aquello que parecía un buen ejercicio universitario de democracia al interior de la propia institución fue opacado por lo anecdótico.
***

EL SINDICATO DE LA NORMAL VERACRUZANA ANTE LA REFORMA EDUCATIVA. Recientemente el secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Escuela Normal Veracruzana, profesor Daniel Domínguez dio a conocer las razones por las cuáles la organización sindical rechaza la reforma educativa: porque no es una reforma educativa, nada dice de planes de de estudio, enfoques teóricos y métodos didácticos, es una reforma laboral de conveniencia política para el reacomodo de los grupos de intereses que co-gobiernan el país; porque se trata de un proyecto político/administrativo que impone un nuevo régimen jurídico/laboral que afecta los derechos del magisterio; porque es producto del autoritarismo del Estado mexicano; porque distorsiona la letra y el espíritu del Artículo Tercero Constitucional; porque ignoró los argumentos de los expertos; porque cumple los dictos de la OCDE; porque estigmatiza al maestro al señalarlo como el único responsable de la situación educativa del país; porque condiciona la permanencia; porque ignora a la educación normal como fundamento filosófico y pedagógico de la educación pública; porque avasalla el espíritu federalista del Estado, atribuyéndole a las entidades federativas el carácter de meros operarios; porque el Estado se deslinda de su responsabilidad en cuestión de derechos laborales y prestaciones, ya que la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado establece que los trabajadores tienen derecho a la plaza definitiva a partir de 180 días de trabajo... La postura del STENV es muy parecida a la de otras organizaciones de maestros que rechazan la reforma educativa; y no lo hacen por temor al cambio. Lo hacen con fundamento legal y pedagógico, porque se están transgrediendo sus derechos y a la propia educación.

***

PARA CONTAR. En Veracruz más de tres mil profesores tomaron el Congreso del Estado; en la capital de la República se movilizan cerca de 25 mil en rechazo a la Reforma Educativa y sus leyes secundarias.

***

http://luisgerardomartinezgarcia.blogspot.mx/





Machetazo educativo
AXEL DIDRIKSSON

MÉXICO, D.F. (Proceso).- La urgencia de emprender una verdadera reforma educativa en el país contrasta con las limitadas y obtusas iniciativas de reforma a los artículos 3° y 73° constitucionales, así como con las propuestas de leyes secundarias que ha presentado el actual gobierno del PRI a través de la SEP, con el respaldo del PAN, del Panal y del Partido Verde.

En lugar de impulsar una reforma orientada a los contenidos, métodos, lenguajes y procedimientos pedagógicos y didácticos para mejorar el aprendizaje de los estudiantes, el gobierno quiere controlar y amenazar la vigencia del trabajo de los maestros; en lugar de propiciar la calidad educativa mediante un programa que articule el conjunto de los componentes de la misma, decidió hacer exámenes y pruebas; en vez de redefinir los contenidos de la formación de los maestros, ha puesto al magisterio en el banquillo de los acusados, y en lugar de controlar el drenaje millonario que sigue manejando a su arbitrio la cúpula del SNTE (aun sin Elba Esther Gordillo), ha dejado intacta la red de complicidades para que las cuotas sindicales lleguen sin pesar a los nuevos dueños del sindicato magisterial.

Así, ha optado por la peor salida y por el esquema de una supuesta reforma, mal denominada educativa, no una moderna, participativa, que lleve a mejoras sustanciales determinadas por cada centro o colectivo escolar, y una que busque el cambio en lo esencial y no en la forma. Ha procedido bajo la consigna de ir alcanzando un mayor dominio sobre el magisterio disidente, por la vía de mantener bajo amenaza de despido o remoción a los que se opongan a los dictados de la SEP, por encima y a pesar de la buena voluntad de los miembros de la Junta de Gobierno del Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEE).

Sin reparar en el daño que se está causando a los estudiantes con lecturas llenas de faltas de ortografía y de errores conceptuales en los libros de texto gratuitos; sin que se atine a conocer de forma explícita qué es lo que quiere lograrse con la reproducción de un modelo empresarial, mercantilista y obsoleto reproducido día con día en las escuelas, públicas y privadas del país, la SEP y el gobierno federal se han dispuesto a hacer pasar los reglamentos de leyes superficiales para el sector no obstante la crispación de legisladores de oposición, de los maestros y de las consecuencias que todo esto está provocando en contra de la educación de millones de niños y jóvenes. Ni autocrítica ni responsabilidad ante nada ni ante nadie.

Se acordaron foros abiertos con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), con la Secretaría de Gobernación; fueron enviadas sendas propuestas reglamentarias hacia Congresos locales, como en Guerrero; se acordaron mecanismos de participación y consulta en otros estados de la República, y la misma Comisión de Educación de la Cámara de Diputados organizó y discutió de forma abierta con el magisterio, con expertos, académicos y otros actores, los temas candentes de una reforma educativa y… al final, la SEP y el gobierno decidieron enviar al periodo extraordinario de sesiones de la Cámara de Diputados, en su esencia y sin cambios importantes, las mismas leyes secundarias que habían sido conocidas desde los inicios de este año. Esto que parece una burla, lo fue.

Con lo anterior, el PRI y la SEP pretenden echar por la borda todo lo que se había acordado con los maestros, o lo que pudiera haberse propuesto en cualquier foro o instancia, porque el interés demostrado era parte de un escenario de oropel, como para burlarse de los que ingenuamente contribuyeron a formular iniciativas dirigidas a la calidad o a la equidad de la educación nacional, porque al final el PRI y sus aliados ya habían decidido imponer sus muy cuestionados mecanismos de control sobre el trabajo magisterial, al igual que su caricatura de reforma.

Ante tal cinismo y arrogancia, no podrá haber acuerdo posible en los términos en los que se han presentado las iniciativas de leyes secundarias respecto de las reformas en el 3º y 73º constitucionales, porque muy poco tienen que ver con lo que significa una reforma educativa en serio y de altura. No podrá elevarse la calidad de la educación aplicando exámenes y pruebas una, dos o tres veces a los maestros, como tampoco con la mera aplicación de exámenes a los estudiantes. El asunto es bastante más complicado que el reduccionismo con el que se quiere ver el problema educativo en el país.


Tampoco podrá avanzarse si se alarga y polariza este conflicto de forma innecesaria y, peor aún, si se toma la decisión de encapricharse para imponer las leyes secundarias a través de un albazo legislativo. Si esto ocurre, habrán ganado, pero a la mala; se impondrán, pero por efecto de su negligencia y de su ignorancia; reprimirán si hasta eso llegan, pero no podrán hacer avanzar, de un modo que beneficie a todos, a favor de una educación con equidad y justicia. Allá ellos. (Proceso)

jueves, 22 de agosto de 2013


La masonería en el poder
Luis Gerardo Martínez García

¿Qué presidentes de la República pertenecieron a Logias Masónicas? ¿Miguel Hidalgo y Costilla fue masón? ¿Fueron Grandes Luminares Valentín Gómez Farías y Benito Juárez?  Siempre, preguntas de este tipo despiertan interés especial en cierto sector de la sociedad. Algunos buscan por intereses profesionales información al respecto, otros por cultura general y otros más por pertenecer a Logias Masónicas. Esas dudas y esas búsquedas han coadyuvado a sacar a la luz pública datos, nombres y relaciones de poder  entre el gobierno y los ritos que por tiempo se guardaron en secrecía.

Por años, mucho se especuló sobre la masonería; mucho se dijo sobre los nombres de sus integrantes; mucho se intentó traducir los lenguajes, rituales, discursos y mensajes. No fue sino hasta el México contemporáneo en que (hasta masones) escritores e investigadores hicieron estudios serios que después fueron publicados en la prensa o en libros especializados. Incluso, no es extraño encontrar ya revistas especializadas como aquella Revista Supremo Consejo, órgano oficial del Supremo Consejo de México del grado 33o del Rito Escocés Antiguo y Aceptado.

Ni tampoco extraña encontrar trabajos en el extranjero como aquel facsímil electrónico de la Universidad de California digitalizado por Microsoft de Edwin Allen Sherman Brief history constitution and statutes of the masonic veteran associations of the pacific coast, San Francisco, California, de 1901. Hoy podemos, incluso encontrar logias masónicas anunciadas en Facebook o en Twitter.

Recientemente recibí de Wenceslao Vargas Márquez su libro La masonería en la presidencia de México que puede considerarse una de las investigaciones más serias y más completas. En el marco de los centenarios de la Independencia y de la Revolución mexicanas, el autor enriquece esta nueva cultura por difundir la filosofía masónica a través de ensayos con una narrativa muy bien estructurada, y de fichas que dan cuenta de las historias de vida de cada uno de los gobernantes mencionados.

Wenceslao Vargas Márquez explora ejes de investigación y construye vasos comunicantes entre hechos históricos y personajes destacados de la política para armar un texto que abarca de 1759 hasta el 2006, incluyendo el ensayo "Miguel Hidalgo y Costilla, ¿masón?". El autor, quien no sólo sabe del tema sino que además lo conoce, refiere como uno de sus puntos nodales que la masonería mexicana adoptó en sus filas a la política y a los políticos militantes, y que ésta "entendió a las logias como células que defendían o cuestionaban posturas ideológicas y planes de trabajo de la política y de la administración pública nacional". El texto testimonia una búsqueda exhaustiva de las transformaciones que vivenciaron los grupos masónicos a lo largo de la historia mexicana, refiriendo relaciones de poder, a favor o en contra, de los políticos y sus proyectos.

"Una conclusión importante es que cerca de un 90 o 95% de los gobernantes mexicanos desde 1760 han tenido contacto con la masonería; o han militado en ella o la han auspiciado o la han perseguido actuando como fiscales sobre todo en el virreinato y la primera república federal", señala el autor. Además evidencia que no todo fue placentero en esa relación entre gobiernos y masonería. Señala que tanto Madero como Ortiz Rubio y el propio Alemán para llegar a la presidencia de la República fueron impulsados por las logias masónicas; cuando habla de Cárdenas, dice que impulsó de forma importante la masonería, pero también profundiza en el hecho de que no hay evidencia de una relación definitoria para lograr las presidencias de Echeverría, López-Portillo, De la Madrid o Salinas. Expresa también la decadencia de la masonería en ciertos periodos de la historia en México.

Finalmente, y en virtud de los acontecimientos que enmarcan el libro La masonería en la presidencia de México de Wenceslao Vargas Márquez, éste dice "Masones fueron muchos de los directores de la Independencia, de la Reforma y de la Revolución. El Rito Nacional Mexicano sólo enlista a dos presidentes como Grandes Luminares de esa agrupación: a Valentín Gómez Farías (1846-1847) y a Benito Juárez (1869)". Ilustra el autor los orígenes, logias y ritos de la masonería a profundidad. Es un libro que requiere leerse sin prejuicios, a detenimiento. Como académico, el autor reviste el libro de análisis a partir de datos, anécdotas y descubrimientos, pero sobre todo de una dedicada investigación bibliográfica y hemerográfica que le merece la categoría de altamente recomendable. Es cuanto.

--—------------------
http://luisgerardomartinezgarcia.blogspot.mx/

Las exigencias de la CNTE
Manuel Pérez Rocha

Sin duda, la CNTE es hoy un actor poderoso, por ventura imposible de ignorar en el campo educativo y político del país. En estos meses ha adquirido renovada fuerza y ha sumado a sus demandas a amplios sectores del magisterio de entidades en las cuales hace unos meses no tenía presencia. Un factor determinante de este fortalecimiento han sido los graves errores de los gobiernos en materia educativa a lo largo de los recientes 20 años, la perversa campaña de la plutocracia mexicana en contra del magisterio (comandada por Televisa/Mexicanos Primero), y las maniobras para cercenar los derechos legítimos de este gremio. La CNTE no es una invención nueva, ni producto de la ocasión; más de 30 años de lucha constituyen la perspectiva desde la cual deben juzgarse su actuar y sus demandas. Incurrirían en un grave error quienes en este momento crítico del país pretendieran ignorar el movimiento de la coordinadora, o manipularlo o someterlo.

La CNTE no es perfecta, pero es una realidad ajena al vicioso sistema político mexicano; no es un partido, ni una secta, ni un grupo de interés económico; es un movimiento con dos objetivos explícitos básicos: la democratización del SNTE y la reforma educativa, imposible de lograr ésta sin la primera. Como todo movimiento de masas (al oír esto la democracia se tapa la cara horrorizada), no tiene estructuras que lo delimiten con precisión, ni un padrón oficial que registre a sus miembros (o los expulse), ni líneas de mando que lo anquilosen y corrompan. No es, empero, un movimiento espontáneo, ni anárquico (ni anarquizante); lo aglutinan objetivos claros, una historia, y un estilo de trabajo que genera gran dinamismo… y también la repulsa de la academia exquisita por juzgarlo rancio, setentero.

El gobierno federal en la práctica ya no aplica a este movimiento el ni los veo ni los oigo, no puede ocultar que los ve y los oye, pero irresponsablemente pretende engañarlos, torearlos, batearlos y… ¿? La Secretaría de Gobernación simuló abrir un espacio de diálogo con la CNTE, pero la justa sensación de los maestros es que fue sólo un mecanismo distractor pues los funcionarios de esta secretaría, muy amables y corteses, nada efectivo han hecho para que las demandas y planteamientos del magisterio sean seriamente considerados. En el convenio firmado por Luis Enrique Miranda, subsecretario de Gobernación, y la CNTE, el pasado 8 de mayo, el gobierno se obligó a entregar las propuestas de la CNTE (y los resultados de los foros a los que se comprometieron a convocar conjuntamente, y a los que asistieron más de 10 mil personas) a las instancias legales correspondientes para su procesamiento. La Secretaría de Gobernación se obligó también a ser el vínculo con diversas instancias y niveles de gobierno, a efecto de seguir manteniendo y privilegiando el diálogo que hasta ahora se ha dado.

Sin duda, las instancias legales correspondientes serían la Secretaría de Educación Pública, la Presidencia de la República y las cámaras de Senadores y Diputados. Nada de esto ocurrió, según se exhibe en declaraciones del propio secretario del ramo. En conferencia de prensa ofrecida el pasado martes 13, la reportera de La Jornada preguntó al funcionario si en esta iniciativa se tomó en consideración parte de las propuestas de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, que habían venido también planteando algunos puntos que usted mencionaba, esta evaluación integral que se consideraba en los contextos sociales, si eso fue parte de lo que ya se integró a esta iniciativa. Chuayfett respondió: “En relación a (sic) las propuestas de la coordinadora, éstas fueron entregadas a algunas de las autoridades del pacto, y evidentemente nosotros tuvimos en cuenta algunas de esas propuestas, como es el caso o coincidimos –mejor dicho– con alguna de esas propuestas, como es el caso del proceso de evaluación diferenciado de acuerdo a (resic) los distintos contextos que existen en el país en el sistema educativo”.

¿Autoridades del pacto? Reveladora afirmación del funcionario. Ahora resulta que el pacto está compuesto por autoridades. ¿Autoridades nombradas por quién? ¿O elegidas cuándo? ¿Con base en qué ley? ¿Cuáles son sus atribuciones? En un lapsus, corregido de inmediato, el secretario afirmó que tuvieron en cuenta algunas de las propuestas de la CNTE. Bueno, no, no las tuvieron en cuenta, no podían, para ellos la CNTE ni siquiera existe; simplemente coincidieron con ellas, como por casualidad.

Aunque no quieran reconocerlo los gobernantes, las movilizaciones de la CNTE han logrado algunos cambios en la política e iniciativas legales que en materia educativa ha impulsado con violencia el actual gobierno prianista. Violencia, pues para avanzar, incluso han pasado por encima de las leyes vigentes y han engañado a los maestros y a la sociedad. Su bandera es la calidad de la educación, cabe preguntarse qué entienden por educación de calidad después de tantos costosísimos desatinos reconocidos por la propia SEP (por ejemplo la Alianza por la Calidad de la Educación, la Carrera Magisterial, Enciclomedia, Enlace, empobrecimiento de los libros de texto, imposición de programas por competencias), cuando reparten libros de texto con más de un centenar de faltas de ortografía y el propio secretario se expresa con tanta incorrección.


Peña Nieto ha dicho que la reforma educativa no se negociará. Harían bien quienes detentan el poder en leer el manifiesto y plan de acción de la CNTE. Los maestros no están negociando, están exigiendo que se dé marcha atrás a disposiciones legales que deteriorarán más la educación y atropellan sus derechos laborales legítimos. (La Jornada)
Reforma abortada: ¿fue la CNTE, el Pacto o el viejo PRI?
Carlos Puig

Muy temprano en la mañana de ayer la versión digital de MILENIO tenía la siguiente cabeza: “CNTE gana el primer round, Congreso aplaza reforma”. Se mostraban las imágenes de la Gaceta Parlamentaria cuando contenía, en su anexo D, el dictamen de la iniciativa de la Ley General del Servicio Profesional Docente que el lunes había aprobado, sin los votos de la izquierda, la Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos; y la imagen de cuando dicha iniciativa había desaparecido misteriosamente de una nueva versión de la gaceta.

A esa misma hora en MILENIO Televisión el líder de los priistas en San Lázaro, Manlio Fabio Beltrones, dijo que los maestros que protestaban estaban confundidos: “Esto no se va a analizar, siquiera a subir, a discutir, seguirá un proceso de análisis en la comisión para desahogarla en otro periodo de sesiones”. Invitó a los maestros inconformes a hablar e insinuó que el aplazamiento tenía que ver con la presión que en la calle había hecho la CNTE.

Un par de horas más tarde Jesús Zambrano dio otras explicaciones. Y la próxima cabeza en MILENIO era que había sido el consejo rector del Pacto el que el martes, en acuerdo con el gobierno, había decidido dejar fuera del extraordinario esa parte de las reglamentarias. Y la decisión no tenía que ver con la CNTE, sino con la manera en que los priistas habían impuesto, sin discusión y sin haberlo consensuado con el Pacto, un dictamen el lunes. Pero, si como insinuaba Zambrano, había otro texto salido del Pacto, ¿dónde estaba?

En la tarde corrieron versiones que el lunes en la Comisión de Educación los priistas habían sido alentados por los gobernadores del tricolor que querían descarrilar la reforma. La presión de la coordinadora no podía ser pretexto para aplazar la discusión, alegaban algunos, porque está claro que no habrá reforma que los convenza.

Para la noche Beltrones dejaba en claro que no había manera en que la Ley General de Servicio Profesional Docente se discutiera en el periodo extraordinario. Los pactistas insistían en que había una oportunidad para retomar otro dictamen.


A las diez de la noche estaba claro que la CNTE había ganado. ¿Quién más estaba celebrando? (Milenio)

miércoles, 21 de agosto de 2013

Formas de la resistencia magisterial
Claudio Lomnitz

Escribo estas líneas desde la ciudad de Oaxaca, habiendo leído los periódicos del martes, acerca de los choques entre maestros de la sección 22 del sindicato de maestros (de Oaxaca) y la Policía Federal, delante del Congreso de la Unión. Mi tema de hoy no es el contenido de la reforma educativa y de las leyes secundarias que aprobó el Congreso el lunes, sino que se dirige únicamente a la forma de la resistencia magisterial. Divido mi opinión en cinco puntos.

1. La pobreza de la calidad educativa es un problema del país, y no sólo de los maestros. Importa comenzar reconociendo esto, porque las manifestaciones en curso tienden a exponer la falta de educación de los maestros, facilitando así que el resto de la sociedad vea sólo la paja en el ojo ajeno. Vale la pena comenzar recordando que quizá los maestros no sean mejores que el resto de la población, pero tampoco son tanto peores. Por ejemplo, el periódico La Razón publicó recientemente que los nuevos libros de texto gratuitos aparecieron con más de 80 errores de ortografía. Por otra parte, tenemos ya varios sexenios de conocer los hábitos de lectura de nuestros presidentes, y no hay ahí demasiado de qué ufanarse… Y los gustos del empresariado tampoco es que sean impecablemente exquisitos; recuerdo siempre al periodista Galo Gómez, que en paz descanse, que decía que el flamante edificio del periódico Reforma, en la ciudad de México, era un ejemplar magnífico de una arquitectura muy popular entre el empresariado regiomontano: el Durazo tardío...

Reconozcamos, entonces, que el problema de la educación es de la sociedad entera, y no únicamente del magisterio.

2. Sin embargo, los maestros no han aprendido aún a verse a sí mismos como líderes en el rubro de la educación. En vez, tienden a verse como síntoma o efecto de las malas políticas del Estado y de las carencias generales de la sociedad. Los grupos de maestros más combativos se enorgullecen, no sin razón, de ser luchadores –y vaya que lo han sido–, pero imaginan que su labor se debe dirigir primero a resistir las políticas del Estado, para que un buen día un nuevo Estado, un Estado bueno que vele por los verdaderos intereses del pueblo, los venga a redimir.

Hay ahí, me parece, una opinión exagerada del poder del Estado. Se trata de una deformación o ilusión que ha sido fomentada desde el propio Estado, que ha sido el principal responsable de reducir al magisterio a ser brazo de la integración nacional, antes que en ser un cuerpo comprometido a ultranza con la formación de conocimiento en los niños…

Si la sociedad toda tiene un problema educativo, el Estado también lo tiene. Por eso, el magisterio debe mirar a su alrededor y darse cuenta de una buena vez de que la sociedad y el Estado cuentan con ellos para ser los líderes en el tema de la educación. Los maestros tienen que asumirse como los encargados de la educación, y no como víctimas de la falta de educación del Estado. Si ellos no se preparan como líderes, nadie les va a conceder ese papel.

3. Reconocerse líderes implica separar la lucha por sus causas gremiales de su papel como educadores, y mantener siempre intacto el papel de educador. Los estudiantes deben ser siempre aliados de los maestros, y nunca sus rehenes. Los maestros no deben nunca sacrificar la educación de sus estudiantes a cambio de sus causas gremiales, por justas que éstas sean (y, frecuentemente, son justas). Las batallas de los maestros las tienen que ganar sus alumnos, y los padres de sus alumnos. Las tiene que ganar la sociedad.

Esto representa un problema político inmediato para los maestros, porque la estrategia que señalo tarda algunos años en comenzar a funcionar –los maestros se tienen que ganar el agradecimiento, el respeto, y aun el liderazgo en sus pueblos y colonias, y eso tarda, y significa que se pueden perder algunas luchas gremiales a corto plazo. Sin embargo, valdría la pena pensar en si vale la pena ganar luchas a costa de darle la puntilla a la imagen pública del magisterio. Eso difícilmente se recupera.

4. Los métodos de la lucha magisterial deben ser consonantes con la función educativa de los maestros: hay que luchar enseñando. Los maestros deben aprender a luchar con las armas propias de su profesión: dando ejemplo de educación, en vez de retratándose a sí mismos como víctimas de la falta de educación. Para esto habrá que idear formas de resistencia basadas en el respeto –dar un no absoluto a la violencia. No a portar palos. No a fracturar huesos de policías, aunque sea en defensa propia.

¿Existen formas de resistencia que se basen en educar a la sociedad? Desde luego que sí. Lo primero –que se ha hecho demasiado poco– es librar una batalla de inteligencia por la opinión pública. ¿Es mala la reforma educativa? Hay que explicar por qué, y hay que proponer alternativas mejores. Esto último importa, porque si se hace una lucha que mucho rechaza y poco propone, el magisterio será percibido como esencialmente conservador –y la educación es siempre progresista.

La lucha tendría que dirigir sus esfuerzos a las asociaciones de padres de familia, a la prensa, a los congresos locales y de la unión... Tendría que llevarle siempre la delantera a la SEP –ser los primeros en corregir sus errores, en proponer soluciones mejores y más justas. Que quede claro que los maestros son los primeros interesados en mejorar la educación en este país.


5. Por último, el magisterio debe evitar que su lucha se transforme en una impugnación abstracta del neoliberalismo. Los maestros de los estados de Oaxaca, Chiapas, Guerrero y Michoacán alegan que la reforma educativa es contraria a los intereses de comunidades indígenas y que fomenta la competencia en lugar de la cooperación. Creo que tienen algo de razón. Pero el desarrollo de una alternativa, formulada desde el magisterio tiene que partir también del reconocimiento de que las comunidades del sur mandan un enorme contingente de población al norte –a Estados Unidos principalmente, y a la frontera norte. Ahí, importa, y mucho, que los jóvenes sepan leer y redactar, sumar y multiplicar, que sepan algo de historia y de geografía, etcétera. Es decir, que las medidas de la OCDE tienen también alguna relevancia en Guerrero y en Oaxaca. Ojo, tener relevancia no implica que su normatividad debe ser la única, ni la principal. Pero darle la espalda a la estandarización educativa tampoco va a funcionar. (La Jornada)
Reforma educativa: menú empresarial a la carta
Luis Hernández Navarro

El 14 de agosto, en su cuenta de Twitter, el empresario Claudio X. González escribió, jubiloso y categórico: Ya era hora que Ejecutivo enviara iniciativa de leyes secundarias educativas. Ahora toca al Legislativo ir a fondo para transformar el sistema. Ese mismo día, remató su regocijo con un nuevo mensaje: El arte supremo de la guerra es vencer al enemigo sin necesidad de pelear: Sun Tzu.

El beneplácito del presidente de Mexicanos Primero hacia la iniciativa del gobierno federal y su orden al Legislativo fueron desencadenados por el anuncio del secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet, la tarde del 13 de agosto, de que la Presidencia de la República enviaría esa misma noche al Congreso las iniciativas de leyes secundarias de la reforma educativa.

La cita de Sun Tzu no fue un desplante de erudición, sino algo mucho más banal: una notificación, no muy sofisticada, de que el proyecto educativo de la coalición que él representa, se había impuesto sin tener que luchar abiertamente. Sus chantajes, presiones y amenazas dieron resultado. El Ejecutivo presentó como propia la propuesta empresarial de reforma a la enseñanza, diseñada por la Organización para la Cooperación al Desarrollo Económicos (OCDE) y cabildeada por las cámaras patronales.

Por supuesto, quien salió a defender y explicar las iniciativas de leyes en público no fue el gobierno federal, sino el mismo Claudio X. González. Para que no quedara duda de que la propuesta educativa es suya, el hasta hace no mucho tiempo presidente de la Fundación Televisa, dijo a Denise Merker que ya era hora de que se aprobaran leyes secundarias para evaluar la función de los profesores frente a grupo. Y detalló: Si entraste como profesor antes de la modificación al artículo tercero de la Constitución, tienes derecho a tres pruebas, si repruebas las tres se te retira del grupo y se te reubica, ya sea en el servicio público o bien dentro de la Secretaría de Educación Publica, y “si eres profesor ‘nuevo’ y repruebas las tres pruebas dejas el servicio público y no se te reubica en ninguna parte”.

Unos cuantos días antes, el 9 de agosto, Emilio Chuayffet justificó su propuesta arguyendo que busca permitir al Estado recuperar la rectoría del sistema educativo, prisionero de los poderes fácticos. Sin embargo, la apresurada proclamación de triunfo de Claudio X. González, demuestra que la afirmación del funcionario es fallida. El Estado no recuperará la rectoría del sistema pedagógico nacional, sino que se la entregará a la iniciativa privada y a la OCDE. A partir de ahora, la agenda y el marco normativo de la educación pública estarán en manos de esos dos poderes fácticos.

En lugar de reconocer que las leyes secundarias presentadas por el Ejecutivo al Congreso son un menú a la carta dictado por los intereses empresariales, Chuayffet pretende disfrazar su sometimiento afirmando que éstas incorporan las propuestas del magisterio democrático. Algunas –aseguró– fueron entregadas a las autoridades del Pacto por México, y evidentemente tuvimos en cuenta algunas de esas propuestas. Por supuesto, sus palabras son falsas. El secretario no hace sino copiar el mismo guión de Enrique Peña Nieto, que trata de legitimar sus pretensiones de privatizar la industria petrolera usando la figura de Lázaro Cárdenas. No hay en ello novedad. Como suele hacer, Chuayffet miente. Esto no es cierto. Lo que se incorporó a las leyes secundarias fueron palabras e ideas de la CNTE de manera aislada y descontextualizada, dejando fuera lo central de su argumentación.

Las iniciativas de leyes secundarias presentadas por el Ejecutivo son un asalto a las conquistas la­borales del magisterio y al principio de bilateralidad en la negociación de sus condiciones de trabajo. Confirman que la reforma educativa es, en realidad, una reforma laboral y administrativa que busca desprofesionalizar al magisterio, vigilarlo, controlarlo y castigarlo. Una reforma basada en la evaluación que hace de la amenaza y el miedo al despido o a la degradación laboral el centro de una supuesta mejoría profesional del magisterio y la ruta para alcanzar la calidad educativa.

Los empresarios, que tienen menos pruritos que los legisladores, lo han reconocido con absoluta claridad. “La importancia real de la evaluación docente recae –sostuvo el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado– en las consecuencias que deben enfrentar los maestros de no cumplir con los requisitos que marque la ley. No puede haber marcha atrás en lo que ya se legisló en esta materia.” Y, para que no hubiera duda en sus propósitos, la Confederación Patronal de la República Mexicana advirtió que la evaluación de los docentes debe tener consecuencias, positivas y punitivas también.

La aberración de este proyecto salta a la vista si se considera que ni los médicos que trabajan como personal de base en las instituciones públicas, ni los abogados que litigan, ni los ingenieros que realizan obras son evaluados permanentemente para ejercitar su profesión. Una vez que se han recibido, cuentan con su título y cédula profesional y han sido contratados, pueden laborar sin tener una espada de Damocles pendiendo sobre su cabeza. Sin embargo, la nueva legislación establece que los maestros son trabajadores de excepción con un régimen laboral especial, y que deben estar sujetos a vigilancia permanente.

Por si fuera poco, el corazón de las propuestas que se discutirán a partir de mañana en el Congreso implica, en los hechos, el fin del normalismo. Las escuelas normales seguirán existiendo, pero su función estará completamente desnaturalizada. Sus egresados no se diferenciarán en nada de los de otras instituciones educativas.

Las leyes secundarias en materia de enseñanza no resolverán los grandes problemas educativos del país, por el contrario, los agravarán. Lo que sí harán será incendiar la pradera del descontento magisterial. Los grandes empresarios pueden estar contentos, pero no deberían olvidar que no son los únicos que leen a Sun Tzu.


Twitter: @lhan55 (La Jornada)

lunes, 19 de agosto de 2013




Poligrafías
Por Luis Gerardo Martínez García

***
EN LA UV, EL APOYO. Después del evidente distanciamiento entre Raúl Arias Lovillo y Víctor Arredondo Álvarez, el ambiente en la Universidad Veracruzana se empezó a tomar otro rumbo. Raúl, el actual rector, hacia afuera guarda una prudente distancia, respetando el proceso de elección del futuro rector (a); aunque al interior, se dice, éste se dio a la tarea de apoyar a Porfirio Carrillo Castilla, su secretario académico, lo que tiene inconformes a otros contendientes quienes también trabajaron por la Universidad como parte del equipo de Raúl. También se dice que de llegar Porfirio a la rectoría, Ragueb Chain Revuelta ocuparía la secretaría académica de la UV para perfilar al MEIF en línea. Por lo pronto, los diez candidatos, incluidas las tres destacadas académicas, hicieron campañas como no se había dado en otros tiempos de la Universidad Veracruzana. Después de que la Junta de Gobierno dio a conocer a cinco finalistas (Porfirio Carrillo Castilla, Manlio Fabio Casarín León, Sara Ladrón de Guevara González, Francisco Marcelo Montfort Guillén y Leticia Rodríguez Audirac), crece la posibilidad de que Sara Ladrón de Guevara o Leticia Rodríguez asuman la rectoría. La UV podría tener rectora.

***
LA MASONERÍA EN LA PRESIDENCIA.: Wenceslao Vargas Márquez desarrolló por años una extraordinaria investigación histórica sobre los gobernantes en México y su militancia en las logias masónicas. Dio a conocer algunos de sus avances en periódicos nacionales y estatales. Especialmente en Diario de Xalapa publicó "Miguel Hidalgo y Costilla, ¿masón?" el día 11 de septiembre de 1993, entre otros. Muy bien fundamentada su investigación, se tradujo en un libro denominado La masonería en México con alto nivel de conocimiento sobre el particular. Si alguien es especialista en logias masónicas, podrá enriquecer su acervo cultural; si no se conoce mucho sobre ello, podrá encontrar información verdaderamente reveladora. Vargas Márquez señala "Una conclusión importante es que cerca de un 90 o 95% de los gobernantes mexicanos desde 1760 han tenido contacto con la masonería, o han militado en ella o la han auspiciado o la han perseguido actuando como fiscales sobre todo en el virreinato y la primera república federal". En ese sentido, el autor dedica ocho capítulos considerando un periodo histórico de 1759 a 2006 que da cuenta de cada uno de los presidentes de la República. Libro plenamente recomendable.
***
UNIVERSIDADES PARTICULARES, NEGOCIO OCULTO. Las también llamadas IPES (Instituciones Particulares de Educación Superior) esconden costos de cuotas cobradas a estudiantes. Sólo algunas otorgaron esa información requerida recientemente por la SEP. Los dueños de las universidades particulares argumentan que manejan sus costos de manera discrecional por estrategia de mercado; los especialistas, por su parte, plantean que esa información debería de ser de carácter público. Existen IPES que cobran 25 mil pesos porque solo cubren requisitos mínimos, mientras que aquellas con alto nivel de liderazgo nacional e internacional cobran colegiaturas hasta de 100 mil pesos anuales. Es verdad que la SEP y su titular quieren recobrar la rectoría de la educación en el país, aunque es evidente que se les está dificultando cada vez más en todos los niveles y modalidades. En cuanto a universidades particulares, ni siquiera logran como institución que le entreguen información mínima requerida. Lo que complica aún más la situación es que no existe un proyecto trascendente que exija transparencia a las IPES, y mucho menos que les obligue a brindar servicios educativos de calidad.

***
SÓLO 9 UNIVERSIDADES PARTICULARES CON EDUCACIÓN DE CALIDAD. La Secretaría de Educación Pública realizó una primera evaluación de calidad de los servicios que otorgan las universidades particulares; aún así, no todas accedieron a proporcionar la información solicitada (matrícula, colegiaturas, profesorado, programas acreditados, becas otorgadas, acervos bibliográficos, programas de investigación y vinculación con el sector productivo). Para la evaluación la SEP consideró 5 niveles de calidad: Liderazgo, Calidad total, Control, Planeación y Requisitos. Dos conclusiones preocupantes sobresalen en el portal oficial de Aseguramiento de la Calidad de la Secretaría de Educación Pública (SEP): De mil 264 universidades particulares, sólo 19 ofrecen servicios educativos de alta calidad; y sólo 749 cumplen únicamente con los requisitos mínimos para el otorgamiento del Reconocimiento de Validez Oficial de Estudios (RVOE). Grave problema tiene la SEP con las universidades particulares.

***
PARA CONTAR. Hoy lunes regresan a clases 26 millones de alumnos de Educación Básica (4.8 millones de alumnos de preescolar; 14.6 millones primaria; 6.6 millones de alumnos de secundaria), junto con 1.2 millones de profesores y directores.

***

http://luisgerardomartinezgarcia.blogspot.mx/





No a la ley del servicio profesional docente
Ricardo Raphael

La reforma educativa no merece ser aplastada por el peso del reloj previsto para la reforma energética. Sin embargo, la prisa que trae el Ejecutivo para aprobar la legislación secundaria en materia de educación, durante el brevísimo periodo extraordinario del Congreso, solo puede explicarse por la gran importancia que hoy tiene el tema energético y el segundo plano al que están destinados todos los demás asuntos.

La semana pasada la SEP presentó oficialmente las iniciativas de reforma a la ley general de educación, y las propuestas de Ley General del Servicio profesional docente (LGSPD), así como del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE).

Asumen los promoventes que su contenido está suficientemente discutido y que por tanto solo queda a los legisladores levantar la mano para aprobar los textos. Es una falta de respeto hacia el Poder Legislativo suponer que sus integrantes pueden examinar, dictaminar y sancionar, en tan breve lapso, las piezas que transformarán al sistema educativo mexicano de los próximos treinta o cuarenta años. Tanto o más grave es pedir a senadores y diputados que suscriban piezas legislativas lastradas por defectos importantes.

Cabe aquí hacer una distinción a propósito de la ley del INEE. De las piezas presentadas ésta es la única que muestra síntomas de madurez: recoge la opinión que los expertos, la sociedad, las autoridades y los maestros han sostenido durante los últimos diez años. En cambio, las iniciativas de reforma a la ley general de educación y la propuesta de ley del servicio profesional son todavía construcciones en obra negra.

Los errores de la primera derivan de las carencias de la segunda, por tanto vale la pena centrar el análisis en la LGSPD.

Tres son los argumentos que me llevan a expresar una opinión crítica: 1) la necia confusión que considera como sinónimos a la profesionalización y a la evaluación docente; 2) la imprecisión de responsabilidades y competencias entre las autoridades federales y locales y, 3) la ausencia de un sistema nacional para el servicio profesional docente que asegure un piso mínimo y homogéneo en la calidad de las y los profesores.

Sin ánimo de repetir lo que se ha publicado previamente en estas páginas, cabe reaccionar en contra del argumento que supone que, para mejorar la práctica profesional de los educadores, basta con evaluarlos y punto. La profesionalización va más allá de esta herramienta; implica ofrecer al profesor, de principio a fin, una carrera que asegure certidumbre en el puesto a partir de criterios basados en el mérito y el esfuerzo profesional. En revancha, la iniciativa presentada no menciona una sola vez el término “carrera docente” y decenas de veces la palabra “evaluación.”

La segunda deficiencia de esta iniciativa es la ambigüedad que prevalece entre las responsabilidades asignadas a las autoridades federales y aquellas relativas a las autoridades locales. Por haber utilizado una técnica jurídica rebuscada y por ampararse en un modelo inacabado para la gestión del servicio profesional, las facultades entregadas por la iniciativa a cada ámbito de gobierno son un galimatías imposible de descifrar. Qué le toca a cada quién es una pregunta sin respuesta que va a potenciar la actual ineficiencia del sistema educativo. (Una prueba de este desorden lo exhibe la mención, en la exposición de motivos, sobre un órgano desconcentrado de la SEP responsable del servicio profesional que no vuelve a aparecer nunca más en el cuerpo del texto sometido al Congreso).

Finalmente, y quizá más grave que cualquier otra cosa, es haber concebido una gestión para el servicio profesional docente que terminará creando 32 sistemas distintos, uno para cada entidad federativa. Contrario a los principios plasmados en la Constitución, los autores de la iniciativa no imaginaron un sistema nacional de profesionalización para los maestros, sino un servicio responsable de administrar las plazas docentes en cada estado. Esto va a agravar la actual manifestación diferenciada de la calidad educativa.

Por los motivos expuestos cabe exigir que la aprobación de la iniciativa de ley relativa a la profesionalización docente, así como de reforma a la ley general de educación, se trasladen al próximo periodo ordinario de sesiones. Con calma podrían conjurarse los errores que la prisa política está imponiendo sobre este proceso legislativo, el cual es más relevante que la reforma energética.

Analista político

(educacioncontracorriente)
SNTE e INEE: la súplica y el desdén
WENCESLAO VARGAS MÁRQUEZ

Ya advertíamos aquí hace algunas semanas (en abril) acerca de la tarjeta roja directa que el gobierno federal enderezaba al SNTE para no darle silla numeraria y exclusiva en la estructura del redivivo Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) donde alguna vez la dirigencia nacional (Ochoa) y algún allegado (Zebadúa, ahora en SEDESOL) tuvieron dos asientos.

A pesar de la tarjeta roja, el 22 de mayo del año en curso, una semana después del día del maestro de 2013, el dirigente nacional del SNTE pidió en voz alta que se le otorgara al SNTE una silla formal (no de facto) para observar de cerca el proceso de evaluación del magisterio por el instituto.

Así lo narró un diario en esa fecha: “Juan Díaz, presidente del SNTE, dijo en entrevista posterior a la reunión que sostuvo con los integrantes del consejo rector del Pacto por México, que esta solicitud no significa que pretendan "secuestrar" al INEE o apropiarse de éste sino de llevar una representación efectiva de los docentes. A lo que nosotros aspiraríamos es a estar (en el INEE) y tener posibilidades de ser escuchados; de tener un asiento en los temas que discuta el INEE. No pretendemos secuestrar o hacernos cargo del Instituto pero sí ser escuchados. Creo que es un derecho que no sólo es una aspiración nuestra sino que el Instituto requiere, adentro, de la voz de los dirigentes del sindicato", sostuvo”. Hasta aquí la transcripción pero la petición no fue escuchada en la iniciativa que el reciente 13 de agosto presentó el ejecutivo federal:

Dice el art. 30 de la iniciativa que el INEE estará formado por la Junta, la Presidencia, las unidades administrativas, los órganos colegiados y la Contraloría interna. En ninguna parte podrá sentarse el SNTE a pesar de la petición del 22 de mayo. A la junta no podrá incorporarse quien haya sido secretario ni subsecretario de estado, ni procurador federal ni procurador estatal de justicia, gobernador de estado, ni senador, ni diputado federal ni local, ni dirigentes de “asociación política, religiosa o sindical” ni presidente municipal ni gobernador ni jefe de gobierno en los tres últimos años anteriores a su eventual nombramiento. Además no podrá ir tampoco a la junta ningún sentenciado mediante resolución en firme por delito doloso o inhabilitado para desempeñar un empleo, cargo o comisión en el servicio público ni removido de algún cargo público ¡o privado! por alguna causa que implique responsabilidad.

En el artículo 46 de la iniciativa queda un espacio para la esperanza del solicitante pues se dice en dos párrafos: “El instituto contará con las unidades administrativas que se prevean en el Estatuto, cuya estructura organizacional, facultades y funciones se establecerán en el mismo. Asimismo, podrá conformar órganos colegiados conformados por especialistas en las materias de la competencia del Instituto, que fungirán como instancias de asesoría y consulta”. ¿La petición del CEN del SNTE será atendida apartando una silla en alguna de estas dos instancias, las unidades administrativas o los órganos colegiados? Se ve muy difícil.


La súplica ni siquiera tuvo acuse de recibo en público. Si la leyó Chuayffet seguramente fue en la síntesis de prensa y se sintió obligado al desdén.